La Caja Viajera es una forma especial de préstamo bibliotecario destinado a promover la lectura en un público que por diversas razones no puede concurrir a la Biblioteca de manera presencial. Este es un proyecto de fomento lector que nació hace más de 10 años y continúa ampliando su rango de acción a otras instituciones de la comuna.
Como una forma de continuar extendiendo el servicio bibliotecario a más instituciones y organizaciones, acercando los libros a la comunidad en general, es que se ha vuelto a implementar el servicio de Cajas Viajeras, tras un receso producto de la pandemia del COVID-19 que obligó al cierre de la totalidad de las Bibliotecas Públicas y Centros Culturales en todo el país. En esta oportunidad, ya han sido dos instituciones las que se han beneficiado con este contenido literario: Agrícola Weber de Fundo Los Coligües del sector de Casa Quemada de Frutillar y el Colegio Kopernikus de la comuna.
Estas cajas contienen una selección especial de libros que van en directo beneficio de los estudiantes, docentes, apoderados y de la comunidad en general. Finalmente, Sonia Núñez, Directora de la Biblioteca Pública Municipal de Frutillar, indicó que “con la reactivación del servicio de las Cajas Viajeras, se refuerzan los lazos comunitarios en general y además buscamos promover y motivar para que muchas personas más de la comunidad se beneficien y nutran de la lectura”.
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